El exmánager de Guns N’ Roses, Alan Niven, reveló que una historia polémica sobre Axl Rose matando a sus perros fue deliberadamente inventada para atraer la atención de los medios. Niven hizo esta revelación en una entrevista con el medio 2 Loud 2 Old Music.
Niven explicó cómo el equipo de manejo de la banda utilizaba tácticas de choque para ganar publicidad, inspirándose en estrategias del marketing punk.
“Yo vengo de Inglaterra, y allá tenemos ciertas tradiciones de rock and roll y música”,
dijo Niven.
“Estuve yendo y viniendo durante la fase del punk. Nunca voy a olvidar haber visto a los Sex Pistols en la televisión británica de la tarde insultando a un entrevistador, y ver lo que pasó al día siguiente.”

Describió cómo esa experiencia influyó en su enfoque de la publicidad:
“De repente estaban en la portada de todos los tabloides del país, lo que los convirtió en los ‘chicos malos’ a nivel nacional. En una noche, todos sabían quiénes eran los Sex Pistols, lo que probablemente les ahorró cinco años de giras. Así que te guardás ese tipo de cosas en la cabeza, por si las podés aplicar en el momento justo.”
Luego, Niven reveló la estrategia específica que usaron durante la primera visita de Guns N’ Roses al Reino Unido:
“La primera vez que fuimos al Reino Unido, inventamos una historia ridícula sobre que Axl había matado a sus perros”,
contó.
“¿Por qué lo hicimos? Sabíamos que los periodistas borrachos de Fleet Street se iban a enganchar, porque los británicos aman más a sus perros que a sus propios hijos. Entonces hubo indignación: ‘¡Asesinos de caniches invaden el Reino Unido!’. Así conseguimos un poco de cobertura de los diarios sensacionalistas justo al aterrizar por primera vez.”
Esta revelación da una idea de las estrategias de marketing cuidadosamente calculadas que ayudaron a establecer a Guns N’ Roses como una de las bandas más notorias del rock durante su ascenso a la fama.
El enfoque de Niven fue clave para moldear el éxito inicial y la reputación polémica del grupo. Según Wikipedia, Niven fue mánager de GN’R desde 1986 hasta 1991, periodo en el cual la banda tuvo su mayor productividad creativa. Durante su gestión se grabó y lanzó el icónico álbum Appetite for Destruction, que se convirtió en uno de los discos debut más vendidos de la historia del rock.
Su estilo de manejo iba más allá de los trucos publicitarios, involucrándose también en el proceso creativo. Según VW Music Rocks, Niven tenía un enfoque práctico y entendía la naturaleza caótica pero talentosa de la banda. Reconocía que Guns N’ Roses necesitaba un tratamiento diferente al de otras bandas de rock más tradicionales, debido a su comportamiento impredecible y su energía cruda.

La relación de Niven con la banda terminó en 1991, cuando fue despedido por el grupo. Según Louder Sound, su salida marcó un punto de inflexión importante para GN’R. Niven ha declarado que desde entonces, la banda fue “creativamente impotente”. Tras su paso por Guns, continuó trabajando en la industria con otros artistas, como Clarence Clemons e Izzy Stradlin (exGN’R) y su proyecto The JuJu Hounds.
La historia falsa de los perros representa solo un ejemplo de las tácticas no convencionales de marketing que impulsaron a Guns N’ Roses al estrellato internacional durante la escena del rock de fines de los 80. Estas estrategias, aunque controvertidas, muestran hasta dónde podía llegar la industria musical para captar la atención mediática en un mercado cada vez más competitivo.