Dani Filth responde a Zoë Marie Federoff y Ashok tras la polémica en Cradle Of Filth

Dani Filth se defiende de la polémica generada por la ex-tecladista Zoë Marie Federoff y el guitarrista Marek “Ashok” Šmerda. En un comunicado, el líder de CRADLE OF FILTH revela su versión de los hechos, citando «abusos, discusiones y alcohol» como los principales motivos de la ruptura.

El comunicado de Filth aborda varios puntos clave de la controversia que estalló tras la salida de la pareja de la banda:

«Saludos a todos,

Creo que ha llegado el momento de contar mi versión de los hechos, ahora que se han lanzado tantas acusaciones contra la banda, nuestra oficina de management y contra mí personalmente. Pido disculpas por la ligera demora en publicar este comunicado; era importante abordarlo con calma y tras una reflexión. El momento tampoco ha sido sencillo, ya que actualmente la banda está de gira por Sudamérica, con jornadas de viaje agotadoras, vuelos largos y conciertos.

No creo en responder con ataques ni en difamar, pero sí quiero aclarar los siguientes puntos:

1. En primer lugar, el contrato en cuestión

No se trataba de un contrato que se esperase firmar tal cual, sino de un marco inicial sobre el que construir. Una de las razones principales de esta situación ha sido la falta de comunicación respecto a la naturaleza del contrato y lo que se esperaba de las partes que lo recibieron.

2. Compatibilidad con otros proyectos

Nadie en la banda tiene prohibido trabajar con otros grupos ni complementar sus ingresos. Actualmente programamos giras en torno al 40% del año, dejando el resto libre para otros compromisos. Muchos de mis compañeros participan en diferentes proyectos, como puede verse en sus redes sociales. No prohibimos a nuestros músicos trabajar con otras bandas; únicamente pedimos una planificación adecuada, coordinando agendas con la mayor antelación posible.

3. Los primeros días de la gira sudamericana

Me entristece ver que Zoe ha seleccionado hechos concretos para encajar en una agenda, pero estoy dispuesto a compartir el relato completo de los tres primeros días de la gira por Sudamérica para ofrecer un panorama más equilibrado. Durante esos días hubo consumo excesivo de alcohol, discusiones crecientes y repetidas disputas públicas que crearon un ambiente muy difícil para todos. Presencié personalmente intercambios entre Zoe y Ashok que incluyeron abusos verbales y físicos, culminando en un altercado en público frente al hotel y ante fans que se habían acercado en São Paulo. No fue un hecho aislado, sino parte de un patrón de comportamiento que afectó a todo el equipo.

Entiendo que las giras son estresantes y agotadoras, pero la decisión de continuar sin ellos fue necesaria para preservar la salud de la banda y del equipo. Además, nadie sabía nada sobre su embarazo y, de ser así, ¿por qué estaba bebiendo? Ella misma contactó en varias ocasiones con el management pidiendo ayuda para dejar de beber, con extensos mensajes de texto que lo demuestran.

4. Valoración del trabajo en la banda

Es importante para mí que los músicos a mi alrededor sientan que sus aportaciones se valoran. Creo que en gran parte así es, ya que algunos de los miembros llevan conmigo más de diez años. En cualquier caso, siempre hay margen de mejora, así que aprovecharé la situación actual para abrir un diálogo más constructivo dentro del grupo y redactar un contrato más completo que haga sentir a todos cómodos y protegidos en el futuro.

5. En lo que respecta al management

Dez [Fafara, líder de DEVILDRIVER y COAL CHAMBER] y Anahstasia, de The Oracle Management, han sido impecables. Se han mostrado atentos, comprensivos, incluso renunciando a comisiones para que ciertas giras pudieran realizarse, y trabajando estrechamente con la banda para ofrecernos oportunidades muy valiosas.

Al no haber encajado en el grupo, Zoe intenta ahora difamar y mentir para generar rechazo hacia mí y hacia la oficina de management. Hoy en día resulta muy fácil lanzar acusaciones sin pruebas, cuando cualquiera puede erigirse en crítico experto en internet. Solo puedo imaginar qué más se me acusará mientras se trata de destruir la banda y el proyecto.

Quiero subrayar que Dez es honesto y transparente, y que no cobra hasta que autorizo al contable a pagarle. Todo pasa primero por mi contable, que revisa las cifras para decidir qué se puede asumir y qué no. Dez nunca maneja directamente el dinero de la banda.

Respecto al contrato, efectivamente era un mal contrato, pero se presentó para abrir el diálogo con dos miembros que venían generando conflictos internos. Todo partió de un correo de Zoe solicitando una subida salarial para la banda, que se aprobó en pocos días sin objeciones. Sin embargo, su comunicación se fue volviendo cada vez más agresiva y amenazante, sin motivo aparente, sobre todo considerando que su petición había sido aceptada desde el principio.

Las tensiones crecieron y, en el momento de enviar ese contrato, ya habíamos recibido la renuncia de Ashok y de Zoe. Por ello decidimos no gastar presupuesto en un contrato a medida, lo cual fue un error, ya que agravó la situación. Se recurrió a un modelo antiguo que nunca se había usado, demasiado brusco y poco elaborado, y que no reflejaba la realidad de estar en esta banda. No hubo mala intención, sino la idea de iniciar una negociación, pero lo envié apresuradamente pidiendo a la banda que lo firmase.

Lamento que Zoe haya mostrado solo la peor parte y que el contexto se haya manipulado para ajustarlo a un objetivo y hacerlo público. Ahora estoy trabajando con el resto del grupo en un contrato que sirva tanto a ellos como a la banda en su conjunto.

Por desgracia, una banda es también un negocio. Cuando alguien genera problemas, bebe en exceso, no compone, amenaza con demandar al grupo por el uso de su imagen, algo tiene que hacerse. Zoe y Ashok ya habían presentado su renuncia pese a que acepté la subida salarial y otras medidas económicas, así que no tenía sentido invertir en un contrato que sabíamos que no prosperaría.

En cuanto a su salida, tres días después de iniciar una gira de veintiséis conciertos y tras haber prometido profesionalidad, Zoe y Ashok protagonizaron discusiones constantes. Tras un altercado en el backstage, Ashok quiso quedarse a beber después del show, algo que Zoe rechazó con un enfrentamiento público en el hotel, donde incluso insultó a miembros del equipo y arrojó objetos. Aunque comprendo el cansancio acumulado, no puedo justificar ese comportamiento.

Al día siguiente, de madrugada, ambos volvieron a discutir en el aeropuerto y Zoe decidió abandonar la gira, regresando a Arizona. Ashok permaneció unos días más, pero finalmente también se marchó tras comunicar que su matrimonio no funcionaba. Ante los constantes conflictos y tras hablar con su esposa, hizo pública su salida, lo que llevó a su despido inmediato.

Sobre las acusaciones de “fat shaming”, nunca se ha producido tal cosa. Dez no insultó ni hizo comentarios ofensivos. Únicamente recomendó a una exteclista que cuidara su salud de cara a giras y grabaciones, comentario que ella respondió con humor. En cuanto a Sarah Jezebel Deva, nunca formó parte de la banda, pero Dez sí habló con ella cuando publicó comentarios negativos hacia mí, algo que considero parte de su labor como mánager.

Las giras hoy en día son muy costosas, pero eso es un hecho que cualquiera puede comprobar. Personalmente pasé por etapas de alcoholismo, y quizá por eso puedo reconocer ciertos patrones de conducta. Precisamente por ello llevo casi tres años completamente abstemio.

En definitiva, quería aclarar algunos puntos y cerrar este asunto. Gracias a todas las bandas, fans y músicos que han mostrado su apoyo. ¡Lo aprecio mucho!
Seguimos adelante. ¡Nos vemos en la carretera!«